Por 4ta vez desde la llegada de esta pandemia del COVID-19 a República Dominicana escuchamos al Presidente Danilo Medina dar un discurso, en este último discurso pudimos escuchar el supuesto control que han tenido las autoridades, pero como hablar de control si los números que tenemos han sido en base a una deficitaria aplicación de pruebas a los Dominicanos, lo cual ha sido reconocido por las mismas autoridades que han aceptado que no se han podido aplicar la cantidad de pruebas necesarias para identificar la cantidad real de infectados, porque no cuentan con las mismas, entonces, sobre que estadísticas están tomándose las medidas de lugar, ¿en base a suposiciones?.
Hemos visto durante este proceso como se han tomado medidas sin el debido consenso y sobre todo sin una planificación estratégica y ahora nos plantean una reapertura gradual en la cual ¿QUIEN LLEVARA EL CONTROL DE LA MISMA?, es muy fácil decir las cosas, lo difícil va a ser llevar un verdadero control de las consecuencias que tendrá y si estamos realmente preparados para una reapertura sin haber llegado al pico de la curva y al aplanamiento de esta pandemia, aún sin una vacuna o tratamiento para el mismo; no obstante y sabiendo que la situación ha sido totalmente desafortunada y ha llevado a gran parte de la población a verse sin recursos, sobre todo a aquellos que trabajan de manera informal y a todos los que ha sido suspendidos de sus labores, debemos hacernos la pregunta de si, ¿CON LA REAPERTURA PODREMOS REINICIAR LAS ACTIVIDADES DE MANERA PERMANENTE O CREAREMOS UN CRECIMIENTO DESMESURADO DEL CONTAGIO? Esta pregunta es importante responderla y lo malo es que solo lo sabremos una vez se haya medido sus consecuencias, lo cual podría llevarnos a un cierre más agresivo que el primero, ya que podría masificarse la cantidad de personas infectadas y sin contar nuestro país con las herramientas medicas necesarias para enfrentar un real y agresivo brote del COVID-19.
Mientras tanto vemos que, en resumen, el Discurso del presidente Danilo Medina del día de ayer 17 de mayo, en el cual anuncio desescalada por fases lo cual fue llamado “convivir con el COVID-19 de forma segura” (entrar de forma escalonada en una nueva fase) se trató de manera resumida una serie de elementos que han sido tomado en cuenta por el estado, bajo presión del empresariado, para tomar esta decisión de reactivación. Durante las próximas semanas se mantendrá el estado de emergencia el cual mediante el decreto 161-20 fue ampliado por 15 días en todo el territorio nacional.
También se extiende el toque de queda por 15 días adicionales, el cual será variado en horario, a partir del lunes 18; de lunes a sábado de 7 de la tarde a 5 la mañana y los domingos a partir de las 5 de la tarde hasta las 5 de la mañana, lo cual también entendemos que ha sido un error, ya que si vamos a la reapertura negocios de manera gradual, pues estamos enviando a personas a las calles y extendiendo el horario al mismo tiempo, lo cual son 2 medidas que conjuntamente son contraproducentes, ya que podrían ir reactivando las labores, contando con el horario que hasta el momento se ha impuesto, con la finalidad de limitar el horario al de las labores básicas y tener un mejor control de los ciudadanos que están de nuevo en las calles con riesgo de contagio.
Como se garantizará el distanciamiento físico, como se evitarán aglomeraciones, no obstante, el uso obligatorio de mascarillas y demás herramientas de protección, cuando esas herramientas de protección tienen precios que no son del alcance de todos los ciudadanos y no hemos visto que el estado esté proporcionando las mismas de manera masiva.
¿Qué harán las empresas con aquellos mayores de 60 años y los pacientes crónicos o con enfermedades de riesgo, que deberán permanecer en sus hogares? ¿Tendremos que olvidarnos de tener empleados con esas edades, en nuestro país tenemos una ley que proteja de manera efectiva a personas con estas condiciones?
¿Estas medidas de prevención son las que realmente nos permitirán iniciar de manera escalonada y segura, la esperada reactivación de los sectores económicos? Sea usted el jurado.
El gobierno ha previsto 4 fases de desescalada de las cuales mencionaron la primera y algo de la segunda, iniciando el próximo miércoles 20 de mayo se pondrá en marcha la primera fase que permitirá operar parcialmente a las empresas de acuerdo con su tamaño y al número de empleados.
En las microempresas, que pueden tener hasta 10 empleados, podrán trabajar hasta 5 empleados o no más del 50% del personal.
En las pequeñas, que son aquellas de entre 10 y 50, podrán trabajar un mínimo 10 personas y no más del 50% de sus empleados.
Mientras que las empresas medianas y grandes deberán operar, como máximo, con el 25% del personal en la primera fase.
El sector público comenzará a laborar también con el 50% del personal, quedando autorizados los incumbentes a incrementar ese porcentaje si las necesidades así lo demandan.
A partir de la misma fecha comenzará a operar únicamente el transporte público estatal, es decir, Metro, Teleférico y OMSA, en horario de 6 de la mañana a 6 de la tarde.
Este transporte operará aproximadamente al 30% de su capacidad y el uso de mascarillas será obligatorio en todo momento. Además, los usuarios deberán permanecer distanciados y en silencio, evitando socializar dentro de los mismos.
La circulación de las unidades de transporte colectivo privadas se activará en la fase siguiente, de acuerdo a como vaya evolucionando la situación.
Para evitar las aglomeraciones de las horas pico, se establece asimismo la obligatoriedad de horarios diferenciados.
A las 7 de la mañana comenzarían a operar los supermercados, farmacias, sector construcción, industria y empresas de transformación, incluidas las zonas francas de exportación. También iniciarán a esa hora la minería y las canteras, la actividad agropecuaria y agroindustrial y la actividad en puertos y aeropuertos, que seguirán recibiendo únicamente transporte de carga y vuelos ferry.
A las 8 comenzarán a trabajar los empleados del sector público y a las 9 de la mañana entrarían en funcionamiento otros comercios como ferreterías, concesionarios de vehículos, talleres, sector financiero, tiendas de muebles y electrodomésticos, tiendas de tejidos y confección, etc. Además del sector servicios.
Cabe resaltar que durante esta fase se mantienen cerradas las fronteras tanto marítimas como terrestres y aéreas.
Ya veremos si el miércoles 3 de junio podrá iniciar la fase 2 o si, por el contrario, estas medidas solo lograrán un retroceso y una propagación desmesurada del COVID-19
Entre las medidas que ya veían venir y que son consideradas positivas están la ampliación durante un mes más todos los planes de apoyo a los hogares. Es decir, que tanto el programa Quédate en Casa, como el programa FASE (1 y 2), continuarán activos durante el mes de junio.
Además, en el caso de FASE se ha decidido flexibilizar algunas disposiciones.
Hasta ahora para que una empresa pudiera incluir sus empleados en FASE 2 no podía tener un solo trabajador suspendido. Sin embargo, a solicitud de las asociaciones empresariales, a partir del 1 de junio una misma empresa pueda tener trabajadores suspendidos acogidos a FASE 1 y trabajadores con contratos de trabajo activos, acogidos a FASE 2; esto con la finalidad de incentivar a que el trabajador vuelva a recibir su salario completo y realizar su cotización completa a la Tesorería de la Seguridad Social (TSS).
Se ha decidido incorporar al programa FASE, en cualquier de sus modalidades, a los trabajadores de medios de comunicación, restaurantes, heladerías, centros de odontología y estética, empresas de seguridad privadas y veterinarias, entre otros sectores. De igual forma, los trabajadores de las universidades puedan acogerse a la modalidad de FASE 2.
También se anunció un nuevo programa de apoyo a los trabajadores independientes (“Pa’ Ti”).
El programa Pa’ Ti está dirigido a los trabajadores en negocios independientes los cuales serán identificados en una base de datos de personas con esta condición y que tienen préstamos con el sistema financiero formal y que no han podido trabajar por las medidas de distanciamiento social impuestas por la pandemia, a quienes se les facilitará una transferencia transitoria mensual de 5,000 pesos a sus cuentas bancarias.
no recibirán el aporte de Pa` Ti aquellos trabajadores independientes elegibles que ya están siendo beneficiarios por cualquier otro programa, especialmente por el programa Quédate en Casa.
Ha sido acordado con el Banco Central, la Superintendencia de Bancos y la Asociación de Bancos Comerciales de la República Dominicana, la constitución de un Fondo de Garantías y Financiamiento para beneficiar a las Micro y Pequeñas Empresas.
Este fondo, junto a las demás medidas aprobadas por la Junta Monetaria, permitirá la canalización de decenas de miles de millones de pesos en préstamos a las micro y pequeñas empresas, tanto para refinanciar sus préstamos actuales en mejores condiciones, como para tener acceso a nuevos préstamos especializados con tasas de interés más bajas.
Este fondo, que contará con el apoyo técnico de organismos multilaterales, permitirá avalar una cartera de hasta RD$125,100 millones de pesos, compuesta por préstamos actualmente vigentes y préstamos nuevos dirigidos a las pequeñas y microempresas.
En este esquema, el Gobierno estaría dando avales por hasta el 50% de la cartera elegida, mientras que la banca estaría asumiendo el 50% restante. Podrán beneficiarse más de 210,000 micro y pequeñas empresas que tenían préstamos comerciales con calificación de A y B al 29 de febrero de 2020 y que pertenecen a los sectores de comercio, construcción, turismo, enseñanza, manufactura, transporte, almacenamiento y agropecuaria, entre otros.
El Ministerio de Hacienda y la Dirección General de Impuestos Internos, liquidarán el ITBIS producto de ventas diarias sobre una base trimestral, en lugar de mensual, como forma de quitarles presión en su flujo de efectivo.
Estaremos a la espera de lo que dirá en las próximas horas la Comisión Económica sobre todas estas medidas.
Y que ¡Dios nos proteja!